Este lunes se publicó un reporte por parte de Citizen Lab, en colaboración de R3D, SocialTic y el Artículo 19, donde documentaba como 10 periodistas y defensores de los derechos humanos mexicanos, un menor de edad y un ciudadanos de los Estados Unidos fueron espiados a través del software de NSO Group.
#GobiernoEspía: No solo el equipo de @AristeguiOnline fue atacado con Pegasus. Emilio, hijo de Carmen Aristegui, recibió más de 20 mensajes.
— R3D (@r3dmx) June 19, 2017
Entre los periodistas se encuentran los periodistas Carmen Aristegui y Carlos Loret de Mola; Salvador Camarena y Daniel Lizárraga, de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad; los periodistas Rafael Cabrera y Salvador Barragán. Además, se identificaron como blancos a Mario Patrón, Stephanie Brewer y Santiago Aguirre, de la Organización No Gubernamental (ONG) Centro Miguel Agustín Pro Juárez; Juan Pardinas y Alexandra Zapata, del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Todas estas personas tienen algo en común, han estado involucrados en investigar o en hacer informes donde se demuestre el alto nivel de corrupción o la participación del gobierno en los abusos de los derechos humanos.
Desde enero de 2015, la periodista Carmen Aristegui ha recibido mensajes de texto junto con algún enlace. Hasta ahora Aristegui ha recibido otros 25 mensajes que fingían contener información de la Embajada de Estados Unidos en México, personas en su vida personal, su banco, compañía telefónica, etc.
En agosto de 2015, el periodista Carlos Loret de Mola también comenzó a recibir mensajes sospechosos, cuando Loret estaba informando sobre la posible participación y posterior encubrimiento de elementos del gobierno federal mexicano en la desaparición de 42 personas que tuvo lugar en Rancho El Sol.
Estos mensajes, en realidad, tenían el objetivo de infectar los teléfonos celulares para rastrear sus comunicaciones a través de Pegasus, un malware de espionaje electrónico desarrollada y vendida por la firma israelí NSO Group vendida exclusivamente a gobiernos.
Descubiertos por el instituto de investigación Citizen Lab de la Universidad de Toronto, dejaron a la vista de todos quienes fueron espiados presuntamente por el gobierno de México.
