Suecia se hizo con el pase a los cuartos de final de la Copa Mundial Rusia 2018 por primera vez en casi 24 años, con una victoria sobre Suiza por la mínima (1-0), gracias a un disparo de Emil Forsberg, en San Petersburgo.
En un partido disputado con cautela desde los primeros compases, los suecos echaron mano de la fórmula que mejor le ha funcionado hasta el momento: replegarse, defender con solidez y golpear a la contra.
Suiza, por lo tanto, ha sido el equipo más activo sobre el terreno de juego cuando ha tenido el balón. Sin embargo, el planteamiento reactivo del conjunto de Janne Andersson ha resultado más fértil. De las poquísimas ocasiones creadas, las mejores han pertenecido a los suecos.
En una especie de guerra de desgaste, conforme avanzaba el cronómetro empezaron a vislumbrarse destellos de posibles momentos desequilibrantes, pero tanto las malas definiciones de unos como la buena suerte de otros los han empañado. Precisamente fue la fortuna la que se encargó de decidir al ganador.
Hasta ahora, Emil Forsberg no había estado a la altura de la etiqueta de gran estrella que le colgaron de camino a esta fase final. Hoy, sin embargo, tras recibir el balón al borde del área, ha metido a los suyos en cuartos de final con un cañonazo que, desviado por Manuel Akanji, se coló por la escuadra.
El sueño continúa para Suecia. No ha sido una victoria precisamente contundente, pero el equipo cumplió con su trabajo y Forsberg silenció las voces críticas que habían surgido últimamente. Gustav Svensson hizo una labor impresionante como suplente de uno de los jugadores fundamentales del equipo, el sancionado Sebastian Larsson.
No obstante, los suecos se han llevado un mazazo importante con la baja repentina de uno de sus colosos en defensa, Mikael Lustig, que tuvo que abandonar el campo lesionado. En resumen, el pase a cuartos de final es un logro del que todo el equipo puede sentirse bien orgulloso.
Jugador del Partido: Tras las críticas recibidas en su país por no haber estado a la altura de las enormes expectativas depositadas en él, Emil Forsberg ha exhibido su facilidad para convertirse en el hombre decisivo de las grandes ocasiones al anotar el único gol del encuentro.
El dato: 40 millones. La asistencia de 64 mil 42 espectadores no ha batido ningún récord por sí misma, pero ha contribuido a establecer un hito impresionante: con esta cifra de hoy, la asistencia oficial a todas las 21 ediciones del Mundial desde 1930 hasta el momento asciende al increíble total de 40 millones de espectadores.
Lo que viene: Suecia-Inglaterra o Colombia en cuartos de final, el 7 de julio en Samara.