A partir de las huellas de vehículos y pisadas, el personal de la Armada localizó dos “clavos”, consistentes en puntos en donde se entierran los bidones con el crystal líquido o costales con la droga en su versión sólida, en este caso en polvo.
El lugar estaba protegido únicamente con un rustico tejado, en donde está colocada hierba y plantas, con el objetivo de no ser localizada durante los patrullajes aéreos.
Desde el jueves, personal de la Armada, con equipos especiales, para proteger su cuerpo y preservar el lugar de los hechos realiza la revisión de “la cocina” los almacenes del narcolaboratorio, para establecer la cantidad de exacta de droga.
Se calculó que tan solo en el lugar de preparación había 7 toneladas de crystal ya listo para su comercialización, mientras que la primera bodega, hasta este viernes se había localizado más de 400 bidones y 50 costales con la droga, con aproximadamente 40 toneladas de crystal.
En el segundo “clavo”, encontrado hasta la noche del jueves, ya había más de 100 bidones y seguía la extracción de los depósitos, con un cálculo, hasta el mediodía del viernes, de 3 toneladas.