La cantante Demi Lovato dio a conocer que no podía pasar ni una hora sin que consumiera cocaína, así la ex chica Disney pasó su adolescencia, entre alcohol y drogas.
Afirmó que el consumo de drogas le trajo ataques de ira y un incidente con uno de sus bailarines a quien golpeó en 2010.
Fue internada en una clínica de rehabilitación. Con tan solo 18 años, su estrellato se desvaneció.
“Antes de entrar en sobriedad, yo era una de esas personas a quien no le importaba nada (…) Usé cualquier excusa que estuviese a la mano para hacer lo que me diera la gana. Era una pesadilla a la hora de trabajar conmigo. Fui a rehabilitación para buscar un respiro de tanto enfado y amargura”, dijo.
Lovato mantenía a sus padres a raya recordándoles que ella era quien pagaba las deudas de la casa.
“Algunas personas piensan que al ser joven no me puedo mantener sobria, esas son las cosas que quiero probarme a mí misma”, afirmó.
Ahora, con 23 años, cumple cuatro años de estar limpia.