Ford permanece en México a pesar de la cancelación de la construcción de la planta de San Luis Potosí, porque ya inició las operaciones de prueba de su nueva fábrica de transmisiones en Irapuato y en 60 días hará lo propio con la de motores de Chihuahua, aseveró el presidente y director general de la compañía automotriz estadounidense en el país, Gabriel López.
Luego del evento conmemorativo de los 50 años del Comité Cívico de Ford, aseguró que la cancelación de la planta no se debió a motivos políticos sino a cambios en la estructura del mercado.
La verdad es que no nos fuimos de México, no nos gustó la decisión que tomamos”, indicó, al tiempo en que explicó que la cancelación de la planta se debió a que se planeó para fabricar allí el modelo Focus, que pertenece al segmento de los automóviles compactos, del cual los consumidores han disminuido su interés en el últimos tiempos, porque en Estados Unidos el costo de la gasolina se mantiene barato, lo cual provoca que tengan mayor interés en los vehículos de mayor tamaño.
Ante este panorama, abundó que, si se construía la planta de San Luis Potosí iba a producir a la mitad de la capacidad planeada, situación que iba a causar conflictos en los costos de producción y por lo tanto en la rentabilidad de la compañía.
Por ello, señaló que la empresa prefirió solamente instalar la línea de producción de Focus en Hermosillo en lugar de tener una planta nueva con capacidad ociosa.
Destacó que el compromiso con México es tangible cuando se toma en cuenta que Fort emplea en nuestro país a más de 19 mil personas, plantilla a la que se sumarán tres mil con el inicio formal de operaciones, de la planta de Irapuato y de Chihuahua, Las cuales harán transmisiones y motores que se exportarán.